Las habilidades personales son aquellas destrezas o cualidades adquiridas por las
personas para la realización de determinadas funciones. Las exigencias del mercado de
trabajo actual hacen imprescindible la transformación de estas habilidades en
competencias necesarias para que tanto las empresas como su personal sean
competitivos. La innovación, la gestión del tiempo, la toma de decisiones, la
organización, orientación a la excelencia o el compromiso ético se constituyen como
valores indispensables en los entornos profesionales actuales.